Para el aceite de coco, andá a la fuente.
Todo el aceite de coco proviene de granjeros locales de Filipinas, que recibimos a través de nuestros socios. La forma ideal de cosechar este aceite se logra cuando estos granjeros toman cada fruta y presionan la pulpa solamente una vez para extraer el aceite virgen, que se encuentra en su punto máximo de calidad.